La Praza de Abastos de Pontevedra ha visto cómo el miedo por la subida de los precios ha empujado a sus vecinos a comprar ya los alimentos para las cenas de Nochebuena y Nochevieja.
Según se van acercando esas fechas, los pontevedreses ven cada año cómo se encarecen los productos que quieren poner en su mesa. Un ejemplo de ello los vemos en las cigalas de talla grande que el día anterior al día de Fin de Año de 2021 tenían un precio de 65 euros y se vendían este viernes día 16 por 55.
“Hay muchísima gente que ya se ha llevado todo lo que tiene pensado cocinar en los días de las fiestas: cigalas, vieiras, centolla, merluza, rodaballo… También hay quien te dice que por cuatro o cinco euros de diferencia, prefiere el pescado fresco del día, pero el marisco es otro cantar, porque ahí el ahorro es más grande”, afirma una de las vendedoras del mercado.
Pero la inflación no solo es lo que más preocupa a los vecinos. También las condiciones meteorológicas, ya que dependiendo del temporal que haya se podrá coger más o menos pescado y esto es algo que influye en el precio.
Manoli Domínguez, una de las vendedoras de la plaza comenta: “Aquí trabajamos en función de los precios que haya en las lonjas, no los subimos o bajamos según nos apetezca, sino que los fijamos en base a eso”.
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