Agentes de la Guardia Civil de Pontevedra localizaron escondido dentro de una arqueta de canalización de pluviales a un conductor que había sufrido un accidente de tráfico en la autovía A-55 en Tui y que dio positivo en alcohol y drogas.
En concreto, los agentes recibieron una llamada en la mañana del pasado día 3, informando de que se había producido un siniestro vial en el kilómetro 27 de la autovía A-55, a su paso por Tui.
Al lugar se desplazaron dos patrullas, que comprobaron la presencia en la vía de un vehículo que presentaba daños considerables y ocupaba el carril derecho sentido Vigo. El coche accidentado, sin señalizar, había sufrido una salida de vía por el margen derecho y un choque contra la barrera de seguridad lateral.
Sin embargo, no localizaron a ninguna persona ni en su interior ni en los alrededores, por lo que iniciaron una búsqueda ante el riesgo de que el conductor estuviese herido o desorientado.
Otro conductor les informó de que el responsable del siniestro había abandonado el lugar de los hechos, presumiblemente bajo los efectos del alcohol. A unos 50 metros del lugar del accidente, los agentes localizaron al hombre oculto en una arqueta de canalización de aguas pluviales.
El conductor, un vecino de Tomiño de 45 años, dio positivo en la prueba de alcoholemia, triplicando el tope máximo permitido, y dio positivo en cocaína, anfetaminas, opiáceos y THC.
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